Excalibur, la espada del Rey Arturo, negra y plateada

En las leyendas artúricas, la Dama del Lago, a menudo llamada Viviane, Nimuë o Niniane, es una importante figura de cuento de hadas. Reside en un palacio de cristal oculto bajo las aguas del lago Comper, en Brocéliande, y encarna la magia de las aguas y la sabiduría de los antiguos mitos celtas.
Fue ella quien entregó al Rey Arturo la espada Excalibur tras romperse su primera hoja. Esta espada mágica, forjada por las hadas según algunas versiones, confiere a su portador la invencibilidad en la batalla, mientras que su vaina protege contra las heridas.
Viviane también desempeñó un papel crucial en la educación de Lancelot du Lac, a quien educó en su reino acuático tras la muerte de su padre. Introdujo al joven caballero en las artes, la sabiduría y el valor, convirtiéndolo en uno de los miembros más ilustres de la Mesa Redonda.
Al final del reinado de Arturo, tras la batalla de Camlann, fue ella quien recibió a Excalibur, cuando el rey moribundo pidió que la espada fuera devuelta al lago, simbolizando el retorno de la magia a su origen.