Orcrist, la espada de Thorin(El Señor de los Anillos)

Forjado por los elfos de Gondolin en la Primera Edad, el Orcrist no era sólo un arma prestigiosa, sino casi un personaje por derecho propio. Su nombre significa "Asesino de trasgos", una traducción del Goblin-cleaver y sus runas élficas delatan su origen cuando Thorin lo descubre en el escondite de los trolls, antes de que Elrond lo identifique.
En las películas, los artesanos llevaron el detalle un paso más allá: el mango tiene forma de diente de dragón real y lleva la inscripción en sindarin "NAGOL E-LYG", literalmente "Diente de dragón". Esta elección se basa en el material oficial de las réplicas de colección, que incluso mencionan este grabado.
Tras la Batalla de los Cinco Ejércitos, Thranduil devuelve la espada a Thorin y la coloca en su tumba, bajo la Montaña Solitaria. Allí, se supone que Orcrist brilla en la oscuridad si los enemigos se acercan a Erebor. De espada de conquista, se convierte así en el guardián eterno del Reino bajo la Montaña.